Casi 8 de cada 10 pesos que recauda el Estado Provincial provienen de Ingresos Brutos. Este impuesto grava las ventas de bienes y servicios que se hacen dentro de la Provincia. Le sigue en importancia el impuesto a los sellos (10,39%), el impuesto automotor (9,28%) y el inmobiliario (1,72%).
El impuesto a los Ingresos Brutos representa el 78,61% del total de la recaudación provincial. Así surge de los datos provenientes de la Dirección General de Ingresos Provinciales (DGIP).
De acuerdo a estos datos oficiales, en 2017 Ingresos Brutos logró recaudar $1.293.282.893, una cifra que representa el 78,61% de toda la recaudación de la Provincia.
En este punto hay que destacar que este tributo grava con un porcentaje que va desde el 2,5% al 7% a las ventas de bienes y servicios que se hacen dentro de la Provincia.
Este último dato significa que hubo una recuperación en la actividad económica en La Rioja, marcando un crecimiento real del 11,5%, porcentaje que surge de la diferencia entre la suba de lo recolectado por este impuesto (36,3%) y la inflación de 2017 (24,8%).
Hay que recordar que el esquema tributario de La Rioja está compuesto por el Impuesto sobre los Ingresos Brutos, sellados, impuesto al automotor y el impuesto inmobiliario.
El segundo impuesto en importancia para las arcas de la provincia es el impuesto a los sellos. Por este tributo La Rioja recaudó el año pasado $170.974.112. Los sellos representan el 10,39% de todo lo recaudado por la DGIP.
El impuesto a los sellos se aplica a casi todo acto o contrato y no grava la operación sino el documento en sí, por ejemplo, contratos de obra pública, resúmenes de tarjetas, escrituras de compraventa, transferencia de automotor, contratos de locación comercial, de distribución comercial, de sociedad, pagarés y muchos otros.
En tanto, el impuesto automotor representa un 9,28% del total recaudado por los tributos provinciales. En 2017 el impuesto automotor generó un ingreso de $152.721.461 a las arcas del Estado Provincial. Este impuesto es cobrado a los propietarios de vehículos automotores dependiendo del modelo, marca y año de fabricación, y es conocido vulgarmente como la patente.
El último tributo en importancia según su volumen recaudado es el impuesto inmobiliario. En este caso, el Gobierno riojano percibió por este concepto $28.411.965 durante el 2017. El impuesto inmobiliario apenas representa el 1,72% del total de la recaudación provincial.
Este impuesto tiene una relación directa con la valuación fiscal de las propiedades de La Rioja, que es la base imponible de dicha alícuota. Un impuesto que tendría que crecer exponencialmente, ya que graba directamente el patrimonio.
