En enero de 2017 habían ingresado a La Rioja $36 millones, pero en el primer mes de este año la cifra apenas alcanzó los $2,7 millones. Una de las causales fue el debut del “Consenso fiscal” que alcanzaron la Nación y las provincias y la modificación del sistema de distribución de los recursos.
El Fondo Federal Solidario cada vez impacta menos en las cuentas del Estado provincial y en La Rioja se siente. El dato de enero de este año confirma la tendencia.
En enero de 2017 habían llegado a las cuentas riojanas $36.632.146, mientras que en el mismo mes de este año solamente arribaron $2.700.000. El saldo negativo es de más de $33 millones.
También se debe considerar en el análisis de estos números que el INDEC informó que con la inflación de enero (1,8%), el acumulado en los últimos 12 meses llegó al 25%. Es decir que a la baja nominal se le debe agregar su menor impacto por el desgaste del proceso inflacionario.
El Fondo Federal Solidario -más conocido como el Fondo Sojero- son los recursos que el Gobierno nacional envía luego de realizar una retención a las exportaciones que concretan los sectores agropecuarios del país. El dinero transferido solamente puede ser gastado en obras de infraestructura y debe ser coparticipado con los municipios.
Para entender estos números no se puede pasar por alto algunas modificaciones que determinó el acuerdo fiscal entre la Nación y las provincias y su impacto en los municipios.
En este sentido, enero fue el primer mes de aplicación del acuerdo fiscal que alcanzaron las provincias con el Gobierno nacional, y también tuvo la particularidad de que se entregó una compensación por parte de Nación a las jurisdicciones que sancionaron el consenso, y penalidades a las que todavía no lo aprobaron en sus Legislaturas, como fue el caso de La Rioja que se aprobó recién el 29 de enero.
El Gobierno nacional se comprometió en el Consenso fiscal a destinar unos $16.000 millones a las provincias como compensación del nuevo esquema de reparto (fin del Fondo del conurbano e Impuesto al cheque dirigido por completo a Anses), que en la gran mayoría de los casos terminaba dando un saldo negativo para las gobernaciones.
Esa compensación no podrá ser repartida entre los municipios, a diferencia con lo que sucedía con el esquema anterior.
No obstante, la regla del pacto fiscal otorga destinos determinados a esos fondos. "La compensación será administrada por cada jurisdicción y se destinará a inversiones en infraestructura sanitaria, educativa, hospitalaria, productiva, de vivienda o vial en sus ámbitos urbanos o rurales", afirma el inciso del acuerdo. De esta forma, queda teóricamente eximida del derrame hacia los municipios.
Es por ello que habrá que seguir de cerca como continúa el entramado Nación-Provincia-Municipios con respecto a estos aportes.
Los datos que se publican en esta nota surgen de la Dirección Nacional de Asuntos Provinciales del Ministerio de Hacienda y de los depósitos que se realizan en la cuenta del Banco de la Nación Argentina.