Los incrementos afectaron especialmente a los alimentos, la salud y las prendas de vestir. Los aumentos ubicaron a la Provincia por encima del 2,1% que promedió el país.
La inflación en la provincia de La Rioja llegó al 2,3% en el mes de mayo. La información forma parte del Índice de Precios al Consumidor que publicó el INDEC la semana pasada.
El estudio oficial precisa que a nivel país la inflación alcanzó el 2,1%, mientras que en el caso del NOA (región dentro de la cual se encuentra La Rioja) llegó al 2,3% mensual.
La región del país con inflación más alta fue el Noreste con un 2,6%, mientras que en segundo lugar quedó el ya mencionado 2,3% del NOA. En tanto la zona de la Argentina con menos aumentos de precios fue Cuyo con un 1,8%.
Al detallar los productos que más aumentaron en La Rioja en el mes de mayo los números marcan un tema más preocupante: lo que más incrementó su precio son los alimentos, la salud y la vestimenta.
En el caso de la salud llegó al 3%, mientras que alimentos y prendas de vestir alcanzaron un 2,9% en solamente un mes, siempre según los datos oficiales que publicó el organismo nacional de estadísticas y censos.
Se trata de componentes claves de la canasta básica para sobrevivir de cualquier familia tipo, y por ello su crecimiento inquieta de manera especial por su alto impacto económico y social.
El quinto mes del año estuvo marcado por la fuerte devaluación que sufrió el peso, esa desvalorización frente al dólar se trasladó a los precios y marcó que nuevamente el proceso inflacionario continúe siendo un problema al cual el Gobierno nacional no le encuentra una solución.
Los principales analistas económicos del país ya coinciden en la inflación anual no podría cerrar por debajo del 25%, mientras que la administración del presidente Mauricio Macri admitió que la pauta del 15% anual ya no se cumplirá.
Este año el Gobierno provincial anunció que la pauta salarial sería del 15%, teniendo en un cuenta un 8% ya otorgado en marzo y un 7% más que se pagaría en agosto con el sueldo de julio. Es decir que si esa cifra no se modifica la pérdida de poder adquisitivo del principal sector de los asalariados provinciales sería muy alta.