La merma del consumo en La Rioja es similar a la que se registró a nivel nacional (2,1%). Catamarca fue la provincia donde más cayó la demanda eléctrica (-35%) y detrás se ubicaron Misiones (-12%) y Jujuy (-7%). A nivel país ya se acumulan 12 meses consecutivos en baja.
En agosto el consumo de energía eléctrica bajó un 2% en La Rioja mientras que a nivel país acumuló 12 meses consecutivos en baja.
De acuerdo a datos difundidos por la Fundación para el Desarrollo Eléctrico (FUNDELEC), en el octavo mes del año el consumo eléctrico en la Provincia registró una merma del 2% con respecto a agosto de 2018.
Catamarca encabeza el ranking de las provincias donde más cayó la demanda en agosto (-35%) y detrás se ubicaron Misiones (-12%) y Jujuy (-7%). Le siguen Chaco, Corrientes, La Pampa, Santa Cruz, San Luis, y EDEN, todos con una caída del 5%. En orden descendente, continúan en la lista Santiago del Estero (-4%), Entre Ríos (-3%), Formosa (-3%), Tucumán (-3%), La Rioja (-2%), Córdoba (-2%), San Juan (-2%), EDELAP (-1%), Neuquén (-1%) y Santa Fe (-1%), entre otros.
Hay que destacar que la caída del consumo es generalizada en todo el país. De esta manera, en agosto fueron 23 fueron las provincias y empresas que marcaron descensos mientras que solo dos empresas y tres provincias representaron ascensos en el consumo: Chubut (18%), EDES (8%), Río Negro (3%), Mendoza (1%) y EDEA (1%). Por su parte, Salta mantuvo el mismo consumo con respecto al año anterior.
A nivel nacional, la demanda de energía eléctrica cayó 2,1% y sumó 12 meses consecutivos en baja. Así, la disminución en el consumo en La Rioja concide con la media nacional.
Los números que se dan a conocer en esta nota de economiariojana.com.ar surgen del estudio mensual que elabora FUNDELEC.
Para esta medición la prestadora del servicio EDELaR es considerada como parte de la región NOA. Esa zona incluye a Tucumán, Salta, Jujuy, La Rioja, Catamarca y Santiago del Estero.
Cabe aclarar que el nivel de consumo es una variable que solamente mide si aumentó o no la cantidad de energía utilizada, no toma en cuenta las referencias a los precios que los consumidores deben pagar por esa electricidad en las diferentes zonas de Argentina.