Aunque no existen números precisos, la estimación oficial determina una deuda de 200 millones de pesos. Esa cifra no incluye el problema del pago mensual a los PEM. El principal item son los pagos pendientes de certificados de obras públicas.
La actual gestión municipal se irá del Palacio municipal Juan Ramírez de Velasco con una deuda que rondará los $202 millones. La mayoría de esos recursos pendientes de pago corresponden a obra pública.
Esa deuda está compuesta en un 30% en proveedores de servicios, alquileres de locales que usa la comuna, pago de algunos gastos de funcionamiento y sueldos de contratados. Esa cifra estaría rondando los $61 millones.
Mientras que el 70% restante, son aproximadamente $141 millones que corresponden a obras públicas. Es decir, compromisos asumidos con empresas que cumplen tareas en diferentes obras en la ciudad y que ahora quieren cobrar los certificados de obras ya realizados.
El presupuesto municipal del año 2019 fue de $3.600 millones, luego se hizo una ampliación de $773 millones. De esa manera, el esquema de gastos final del año era de $4.429 millones. Sin embargo, lo ejecutado solamente llegó a $2.122 millones.
En la gestión muncipal que se va entienden que es una "deuda manejable", porque remarcan que se trataría de poco más del 10% del total que tuvo el presupuesto 2019 de la Municipalidad y sería un 5% de lo ejecutado.
Sin embargo, esta morosidad no toma en cuenta la realidad de los Programas de Empleo Municipal (PEM). En este caso de se trata de 3.000 trabajadores cuya grilla salarial mensual alcanza los 15 millones de pesos.
Esos recursos no están "calzados" en ningún presupuesto e implican un problema que todos los meses se renueva en la Municipalidad. Lo mismo ocurrirá con la nueva gestión que comenzará el 10 de diciembre.
Esta nota de economíariojana.com.ar está basada en datos tomados desde la Secretaría de Hacienda Municipal