El municipio de la Capital tiene 5.529 empleados en planta. El gasto salarial mensual llegaría a 38.115.171 pesos en caso de aplicarse el incremento del 15% a la totalidad de los trabajadores comunales.
El Gobierno municipal de la Capital necesita 7.467.356 pesos mensuales para poder pagar el aumento salarial que otorgó el Gobierno provincial y que se debe percibir esta semana. Según números oficiales a los que tuvo acceso Economía Riojana, son 5.529 los empleados en planta que tiene la comuna y que estarían en condiciones de percibir este incremento.
La Municipalidad de La Rioja gasta actualmente 30.647.815 pesos mensuales en sueldos de sus empleados. Esa cifra llegaría a los 38.115.171 pesos por mes en caso de que todos los empleados comunales reciban el incremento del 15 % que otorgó el Gobierno provincial con el sueldo de julio, que se cobra en agosto.
Cabe destacar que la cifra de 7.4 millones de pesos mensuales surge de tomar a la totalidad de los empleados municipales (incluyendo a los que no cobran quincenita) y excluyendo a los 174 funcionarios que tiene la actual gestión del intendente Alberto Paredes Urquiza.
La pelea política actual entre la Municipalidad y la Provincia está centrada en conocer cómo se financiará esa diferencia generada por el aumento salarial. En el caso de los otros 17 municipios es la Provincia quien liquida los salarios y directamente aplica la modificación remunerativa. Mientras que en Capital es la comuna quien liquida y la Provincia envía un monto fijo, que no varía con los incrementos salariales.
Desde el comienzo de la gestión del gobernador Sergio Casas, la Provincia le envía a la comuna un 30 % de recursos más por mes que en el mismo periodo de tiempo que el año anterior. Es decir, si en enero de 2015 le mandaban a la administración de Ricardo Quintela 100 pesos, a la de Alberto Paredes Urquiza en enero de 2016 le enviaron 130 pesos.
De esta manera, actualmente los fondos que envía la Provincia a la Municipalidad alcanza un número cercano a los 50 millones de pesos por mes.
En ese contexto, surgen dos posiciones encontradas: desde la Casa de Gobierno afirman que con esa plata le debería alcanzar a Paredes Urquiza porqué recibe más fondos que la gestión anterior, mientras que en el municipio aseguran que Quintela designó más empleados en el final de su gestión y que la inflación acumulada supera ampliamente esa referencia del 30 %.
En el medio está la ley de coparticipación municipal sancionada el año pasado por la Cámara de Diputados. Esa norma determina que el Estado provincial sólo reconoce las designaciones de empleados municipales concretadas hasta el 31 de diciembre de 2014.
Las próximas horas son claves en la resolución de este conflicto. Las alternativas son cuatro: que la Provincia envíe los fondos para pagar el aumento, que el municipio deje de prestar ciertos servicios y derive más recursos a salarios, que se llegue a un punto intermedio donde ambos Estados aporten una parte de esos 7,4 millones de pesos o que no se pague el incremento a ningún empleado público municipal y estemos frente a una crisis política/institucional inédita.
(imagen de la nota tomada de prensalarioja.gov.ar).