Pese a esa suba la recaudación impositiva quedó un 26,5% por debajo de la inflación que, en 2019, llegó al 55,5%. Además, en diciembre lo recaudado por el Estado riojano aumentó un 44% con respecto a igual mes de 2018.
En todo 2019 la recaudación de impuestos de la Provincia registró un incremento del 29% con respecto a 2018.
Pese a ese aumento, los ingresos obtenidos por el Estado riojano en materia de impuestos quedaron 26,5% por debajo de la inflación registrada en 2019 y que alcanzó el 55,5%.
De acuerdo a datos aportados por la Dirección General de Ingresos Provinciales (DGIP) a los que economiariojana tuvo acceso, en 2019 las arcas de la Provincia recaudaron $2.957.151.887 en recursos tributarios, lo que determinó la mencionada suba del 29%.
Por otra parte, en diciembre la Provincia logró un incremento del 44% en la recaudación con respecto al mismo mes del año anterior. En el último mes de 2019 se recaudaron en La Rioja $274.540.192 (más de $274 millones) en recursos tributarios de origen provincial.
El esquema tributario de La Rioja está compuesto por lo que la Provincia recauda a través de cuatro impuestos provinciales: Ingresos brutos, sellos, automotor e inmobiliario.
El impuesto sobre los Ingresos Brutos recaudó $223.007.228 en diciembre y registró un aumento del 43% con relación a igual mes de 2018. Ingresos Brutos es el impuesto más importante en cuanto a cifras ya que representó en diciembre el 81,2% del total recaudado por la Provincia.
A su vez, el impuesto automotor obtuvo una recaudación de $22.279.086 en el último mes del año pasado. Con este monto, este tributo logró una suba del 80% en comparación con lo obtenido en el mismo mes de 2018.
En tanto, por el impuesto al sello, el Estado riojano percibió en diciembre $26.538.617 logrando así un aumento interanual del 26%.
Finalmente, el impuesto inmobiliario le aportó a la Provincia $2.715.260 durante diciembre y con esta cifra anotó una suba del 119% con relación a igual mes de 2018.
Hay que destacar que la baja en términos reales de la recaudación provincial, es una clara señal de la fuerte disminución de la actividad económica en el país y de cómo esa situación se refleja en la tributación de las empresas que ven disminuidas sus ventas.
